Las personas mayores que fueron trasladados el 24 de marzo de 2020 por la Junta de Andalucía a la Residencia del Tiempo Libre de El Burgo Turístico, en La Línea de la Concepción, volverán la próxima semana a la residencia municipal de Alcalá del Valle, su centro de origen, según informó la Consejería de Salud y Familias en un comunicado difundido el 8 de mayo de 2020. El comunicado dice así: «Las inspecciones de Servicios Sanitarios y Sociales de las delegaciones territoriales de Salud y Familias y de Educación, Deporte, Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, respectivamente, ha acudido a la residencia de Alcalá del Valle, donde comprobaron que cuenta con todas las condiciones higiénico-sanitarias para la vuelta de sus residentes, una vez que su estado de salud es estable y no están afectados por Covid-19. En total, volverán 28 residentes desde La Línea (hay uno más, pero está hospitalizado por causas ajenas al coronavirus), a los que se sumarán dos personas más, que debido a su estado de salud no se trasladaron a ‘El Burgo Turístico’ y permanecieron en un centro de Villamartín, tras ser curados y dados de alta del Hospital Virgen de los Montañas de esta localidad».
El comunicado de la Junta de Andalucía añade: «La residencia de Alcalá del Valle, que recupera la titularidad municipal, vuelve así a la normalidad con el apoyo de los profesionales del centro de salud, quienes reforzarán el control y vigilancia sobre estos mayores.
La Junta de Andalucía asumió la gestión de esta residencia municipal el pasado 20 de marzo, después de que el alcalde renunciara a su competencia, dando encaje legal y jurídico al procedimiento en tiempo récord, de manera que finalmente se adjudicó a una empresa concesionaria, que la dotó personal sanitario. Anteriormente, desde que el Ayuntamiento de Alcalá del Valle comunicó a la Delegación Territorial de Salud y Familias la situación de afectación por el Covid-19 entre los residentes, el Área de Gestión Sanitaria de Jerez, Costa Noroeste y Sierra de Cádiz articuló las medidas contempladas por el Ministerio de Sanidad (realización de pruebas a trabajadores y residentes y seguimiento de aquellas personas afectadas o que pudieran estarlo por el coronavirus).
Además, se estuvo en contacto permanente con la residencia a todos los niveles: a través de los profesionales del centro de salud de Alcalá del Valle, de profesionales de epidemiología, la Dirección General de Atención Sociosanitaria de la Junta, la Inspección de la Unidad de Centros de Servicios Sociales, la Inspección de Servicios Sanitarios y los propios delegados territoriales de Salud y Familias y de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Isabel Paredes y Miguel Andréu, respectivamente. Asimismo, se procuró asistencia sanitaria a los residentes y profesionales del centro, incluyendo traslados a hospitales cuando fue necesario.
Finalmente, la Junta optó por un sistema de evacuación de los residentes; la Consejería de Salud y Familias tiene previsto la habilitación de zonas de evacuación cuando en una residencia, como era el caso de Alcalá del Valle, puedan existir dificultades estructurales para organizar los aislamientos; falta de personal para desarrollar los cuidados y prevenir problemas de salud; o cuando se produzcan situaciones clínicas específicas debidas a un control clínico insuficiente que puede mejorarse evacuando a los residentes.
Así, desde el pasado 24 de marzo, los residentes de Alcalá del Valle han estado perfectamente atendidos a todos los niveles en la Residencia del Tiempo Libre de ‘El Burgo Turístico’. Allí, SAMU, con más de una treintena de profesionales, se ha encargado de la asistencia sociosanitaria de los residentes, pero también de la atención de sus familiares, ya que durante su estancia en la Línea ha intentado que éstos, en la medida de lo posible, tengan contacto con sus mayores a través de medios telemáticos.
En este sentido, la Junta quiere agradecer su labor, así como a todos los trabajadores implicados (personal sanitario de las áreas de gestión del Campo de Gibraltar y de Jerez, Costa Noroeste y Sierra, así como a profesionales de la Delegación Territorial de Salud y Familias y de la propia Consejería al más alto nivel) que se han encargado del bienestar de estas personas mayores, el principal objetivo de la Administración autonómica por encima de otros intereses partidistas».
Nuevo comunicado
La Consejería de Salud y Familias difundió el 10 de mayo de 2020 un nuevo comunicado:
«Las personas mayores que fueron trasladados el pasado 24 de marzo por la Junta de Andalucía a la Residencia del Tiempo Libre de ‘El Burgo Turístico’, en La Línea de la Concepción, volverán mañana lunes a la residencia municipal de Alcalá del Valle, su centro de origen, con todas las garantías sanitarias y de protección, después de la realización de los test a residentes y trabajadores, y con los equipos de protección individual (EPI) a disposición de la plantilla.
El traslado, gestionado por la Delegación Territorial de Salud y Familias, es fruto de una intensa supervisión de las inspecciones de los Servicios Sanitarios y Sociales de la Junta, tanto en La Línea como en Alcalá del Valle, y se produce después de la realización previa de test para la detección del coronavirus, tanto a profesionales como residentes. En cuanto a la población de Alcalá, como en el resto de localidades, estas pruebas se han realizado con criterios epidemiológicos y según los protocolos del Ministerio de Sanidad vigentes en cada momento.
En total volverán de La Línea, a cargo de la Empresa Pública Pública de Emergencias Sanitarias (EPES-061), 28 residentes, una vez que su estado de salud es estable y no están afectados por Covid-19. La residencia de Alcalá del Valle (cuya titularidad vuelve a ser municipal después de que el alcalde renunciara a su competencia y asumiera la gestión la Junta de Andalucía), según la última visita de la Inspección Territorial de Servicios Sanitarios de Cádiz, reúne los requisitos para reanudar su funcionamiento y ser ocupado de nuevo por las personas usuarias que tuvieron que abandonarlo por motivos de salud y causa de las deficiencias detectadas, que el centro ha tenido que resolver de forma inmediata.
En cuanto a los equipos de protección individual (EPI), mañana estarán a disposición de la plantilla, como se le ha comunicado este fin de semana al alcalde de Alcalá del Valle, que mostró su total conformidad. Concretamente, el pasado viernes, la dirección provincial de la Inspección dependiente de la Delegación de Salud y Familias solicitó a la directora de la residencia municipal que aportara el número de personal del centro, auxiliar y de enfermería, que se hará cargo del cuidado de los residentes, para proceder al envío de los EPI necesarios; la directora ha informado de un total de siete profesionales, que recibirán, como ya ha gestionado la Delegación, un total de 49 EPI.
Labor de los profesionales de la Junta de Andalucía
La residencia de Alcalá del Valle, que recupera la titularidad municipal, vuelve así a la normalidad con el apoyo de los profesionales del centro de salud, quienes reforzarán el control y vigilancia sobre estos mayores.
La gestión de esta situación se ha abordado desde todos los niveles de la Administración autonómica: desde el principio, a través de los profesionales del centro de salud de Alcalá del Valle, de profesionales de epidemiología, las direcciones generales de Atención Sociosanitaria, así como de Personas Mayores y Pensiones no Contributivas de la Junta, la Inspección de la Unidad de Centros de Servicios Sociales, la Inspección de Servicios Sanitarios y los propios delegados territoriales de Salud y Familias y de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Isabel Paredes y Miguel Andréu, respectivamente.
A todos ellos se sumaron, una vez que la Junta optó por su sistema de evacuación de los residentes a la Residencia del Tiempo Libre de ‘El Burgo Turístico’ de La Línea, una treintena de profesionales de SAMU para la asistencia sociosanitaria de las personas mayores y la atención de los familiares.
Además, la Unidad de Residencias, Promoción y Vigilancia de la Salud del Campo de Gibraltar (dirigida por un médico de familia, y compuesta por diferentes profesionales, como enfermeras gestores de casos, epidemiólogos o farmacéuticos) ha puesto en marcha, con los procedimientos de la Consejería de Salud y Familias, todas las medidas necesarias para garantizar la atención sanitaria y vigilancia de la salud, con un seguimiento diario y constante, no solo en ‘El Burgo Turístico’, sino a todos los centros residenciales de esta comarca. También gestiona el trabajo de epidemiología, con seguimiento de pruebas a residentes con alguna sintomatologia (PCR) y las medidas de contacto y control dentro de cada residencia.
En el caso de La Línea, se ha gestionado a través del centro de salud Levante de la localidad, que ha ofrecido seguimiento clinico, tratamiento de todos los residentes, material clinico, aparatos para diagnóstico, etcétera.
En este sentido, la Junta quiere agradecer su labor, así como a todos los trabajadores implicados (personal sanitario de las áreas de gestión del Campo de Gibraltar y de Jerez, Costa Noroeste y Sierra, así como a profesionales de la Delegación Territorial de Salud y Familias y de la propia Consejería al más alto nivel) que se han encargado del bienestar de estas personas mayores, el principal objetivo de la Administración autonómica por encima de otros intereses sectarios».