El historiador Jesús Román Román ofreció el viernes 15 de julio de 2016 en el salón de plenos del Ayuntamiento de El Bosque una conferencia titulada “De la Esperanza a la tragedia: El Bosque 1931-1936”, con motivo del 80 aniversario del inicio de la Guerra Civil. El orador fue presentado por la alcaldesa de El Bosque, Pilar García. Seguidamente se inauguró la exposición “Memoria Recuperada, Memoria Compartida. La Represión franquista en las sierras de Ronda y Cádiz”, con la que se da a conocer el trabajo de investigación y digitalización documental desarrollado por la Asociación Papeles de Historia, a la que pertenece el conferenciante, en los años 2011 y 2012 sobre la represión en las comarcas de la Sierra de Cádiz y Serranía de Ronda. La exposición, que fue presentada, tras la conferencia de Jesús Román Román, por el historiador Fernando Sígler Silvera, también miembro de Papeles de Historia, permanece abierta al público en el Ayuntamiento de El Bosque hasta el 30 de julio de 2016, con el siguiente horario: mañanas: de lunes a viernes de 8 a 14 h; tardes: jueves y viernes de 20 a 22 h; sábados de 11 a 13 h. Esta actividad ha sido organizada por el Ayuntamiento de El Bosque.
Opinión de concejal del PP
Por otra parte, eldiario.es publicó el 20 de julio de 2016 una noticia en la que se recogía unas declaraciones del concejal del Partido Popular de El Bosque José García Carrasco, en las que calificaba de «mamarrachá del franquismo» la actividad de memoria histórica organizada por el Ayuntamiento. A través de twiter, este edil escribió: «Esto fue hace ya 80 años y llegaremos al año 2200 igual»; y continuó: «La historia hay que contarla tal cual es y no de una manera sesgada».
Respuesta del historiador Jesús Román
En facebook, el historiador y arqueólogo Jesús Román Román, que pronunció el 15 de julio una conferencia sobre la Segunda República y el golpe en El Bosque, escribió el 20 de julio: «Parece que hablar de la Segunda República, del golpe de estado en julio de 1936, de la sublevación militar y de la represión o de las víctimas y que tenga cobertura del Ayuntamiento como recuerdo al 80 aniversario de esos sucesos es una “mamarrachá” a ojos del concejal del PP de mi pueblo.
Parece que mi conferencia es una “mamarachá” (por cierto no estuvo para escuchar la “mamarachá”). Años de formación académica, años de trabajo con consultas a diferentes archivos públicos, entre ellos el de mi pueblo, archivos militares o eclesiásticos, consultas de fuentes hemerográficas de la época, bibliografía y varias entrevistas orales para conocer qué es lo que sucedió, sin sesgos ni ideologías, en esos días fatídicos, y los que vinieron, se los ventila con una simple palabra: “mamarrachá”. Si hubiera venido a la “mamarrachá” se hubiera enterado, o no, que en El Bosque no hubo dos bandos, que no hubo Guerra Civil, que el día 20 de julio de 1936 el golpe había triunfado y que en los días sucesivos se desencadenó una brutal represión por parte de los sublevados, costándole la vida a más de 30 personas, más la represión económica, social, o física a los que lograron huir, igualmente sucedió en gran parte de la provincia de Cádiz y resto de España. Flaco favor hace… Pero ya no es por mí, una simple crítica de un concejal de mi pueblo no me va hacer ningún daño.
También hace flaco favor al catalogar como “mamarrachá” una exposición (no sé si habrá visto la “mamarachá” o hablará también de oídas) que es el fruto de varios años de investigaciones por parte de un colectivo como es Papeles de Historia, compuesto por Historiadores, alguno de ellos Doctores, arqueólogos, antropólogos sociales, … y que lleva más de 30 años rescatando la HISTORIA, sí, con mayúsculas, de nuestra sierra. Pero tampoco creo que a mis compañeros le haga daño una simple crítica de un concejal de mi pueblo…
Lo que sí es una mamarrachá es que tergiverse la Historia, que sea tendencioso y que desconozca incluso nuestra Historia, pero sobre todo una mamarrachá es que no tenga la más mínima capacidad de EMPATÍA para con las víctimas que aun reclaman a sus deudos, las que nunca fueron homenajeadas durante 40 años de Dictadura (que se vea la Causa General para que compare), que aún permanecen en cunetas, parajes y cementerios tiradas como perros y que tienen el DERECHO legítimo de reclamar a sus muertos, a rescatarlos de las fosas de la ignominia y de poner luz en sus historias personales. Pero eso fue hace ya 80 años…
