La alcaldesa de El Bosque, Inmaculada Gil (PP), difundió el 26 de marzo de 2013 un comunicado en el que defiende su decisión de asumir la delegación de Urbanismo que antes desempeñaba el edil del PP Salvador Vidal, ante la «pérdida de confianza por tramitar licencias de procedimientos que estaban cerrados». Inma Gil recuerda que «se iban a gastar fondos públicos para hacer nuevos informes técnicos sobre obras que ya cuentan con informes negativos de los técnicos del Ayuntamiento y Diputación y, todo ello, a espaldas del resto del Gobierno». En su comunicado, la alcaldesa expresó: «Mucho se ha hablado y escrito estos días sobre la revocación de competencias al concejal delegado de Urbanismo en el Ayuntamiento de El Bosque, Salvador Vidal, y la reacción posterior del resto de concejalas del PP que han presentado su rechazo a seguir contando con delegaciones municipales». La alcaldesa bosqueña afirmó que hasta el momento «no había querido dar explicaciones públicas al respecto» porque consideraba que «antes había que dar explicaciones en el Pleno para que todos los vecinos que quisieran conocieran de primera mano todo lo sucedido».
El comunicado difundido por Inmaculada Gil continúa: «Una vez que estas explicaciones se han dado, destaca la alcaldesa, “llega el momento de emitir un comunicado público con el que espero dar por zanjada esta cuestión que entiendo que en nada beneficia a la localidad”. En primer lugar, la regidora recuerda que ella no quiso crear en ningún momento “una situación como la que se ha creado”, recordando al respecto que “fueron otros los que lanzaron una nota incendiaria a la calle con la única intención de crear crispación y tratar de desprestigiarme y apartarme de la vida política de la localidad, incluso con una amenaza directa al PP provincial de que debía de posicionarse del lado de una supuesta mayoría”.
Gil recuerda que si los dirigentes populares la han respaldado en su gestión es porque “vieron claro que he actuado correctamente y compartían conmigo la idea de permisividad cero con cuestiones que puedan derivar en irregularidades en la gestión”. En concreto, recuerda que decidió retirar las competencias de Urbanismo a Vidal cuando conoció que “a espaldas mía y del resto del Gobierno local, decidió hacer una contratación menor de un asesor para tratar de sacar adelante ocho expedientes urbanísticos que estaban completamente cerrados, porque contaban con informes negativos emitidos por el propio Ayuntamiento y por la Diputación, siendo éstos preceptivos, teniendo incluso uno de ellos incoado expediente de disciplina urbanística y sancionador”.
La regidora no ve sentido a acudir a un asesor externo, que habría cobrado de las arcas municipales, para hacer informes de asuntos que están zanjados, ya que “según un correo que el ex delegado de Urbanismo mandó al secretario del Ayuntamiento, lo que se pretendía era resolver estos expedientes a pesar de que ya estuvieran más que resueltos de manera negativa”. Gil asegura que no entiende que, como dice el edil, “se hiciera eso para argumentar mejor la negativa, cuando al tratarse de expedientes resueltos, lo que se estaba tratando de buscar era alguna excusa para poder dar luz verde a operaciones urbanísticas que los técnicos, municipales y del Servicio de Asistencia a los Municipios de Diputación, habían determinado que no podían salir adelante”.
De cualquier forma, la alcaldesa de El Bosque destaca que aunque no se llegaran a cometer irregularidades, “la simple sospecha o el simple indicio de que se pueda cometer una irregularidad, bajo mi mandato como alcaldesa, es suficiente para que yo decida retirar unas competencias a un concejal, porque suponen una pérdida de confianza que no es compatible con la delegación de responsabilidades”. Al respecto recuerda que son los alcaldes quienes tienen las competencias y quienes las delegan en los ediles de su confianza y “yo no voy a permitir que se actúe de una forma que considero inapropiada y, por supuesto, que por compromiso con mis vecinos voy a actuar, una y mil veces que tenga que hacerlo, sin tener que esperar a que se consume lo que en principio podría ser una actuación irregular”, destacando que “hay que tener tolerancia cero con actitudes que en nada benefician al municipio, a los vecinos y la igualdad ante la administración, y eso es lo que he decidido hacer en este caso”.
A pesar de mostrar su explicación sobre lo sucedido, la alcaldesa quiere dejar claro que “hay que dar por zanjada esta cuestión y centrarse en seguir trabajando por los bosqueños que son los que nos dieron su confianza para que gobernáramos el municipio”. Por ello, apeló a la responsabilidad de todos los concejales para que “sean capaces de dejar cuestiones personales a un lado y seguir trabajando por y para solucionar los verdaderos problemas de los bosqueños”. Además, lamentó que parte de la oposición “esté tratando de sacar rédito político a esta situación, en lugar de tratar de comprender por qué hemos actuado como lo hemos hecho”, preguntándose al respecto que “si no hubiéramos cortado de raíz esta situación y todo hubiera derivado en que se elaboren unos informes favorables que legalizan obras que ya contaban con informes preceptivos desfavorables de Diputación y Ayuntamiento, ¿se hubiera posicionado la oposición a favor de las licencias dadas gracias a estos nuevos informes externos? ¿Habría o no sido responsable de una irregularidad urbanística?
En resumen, Inma Gil recordó: “estoy aquí para gobernar para todos los vecinos de El Bosque y no voy a mirar los nombres o afiliación política para dar licencias o no, para esto solo debo atender los preceptivos informes técnicos y jurídicos que obren en cualquier expediente”. “Aquí vamos a valorar siempre si se cumple con la legalidad, tal y como digan los técnicos expertos en la materia, y si no se cumple no vamos a utilizar dinero público para tratar de sacar adelante expedientes a toda costa, como me temo que presuntamente se iba a hacer en este caso”, destaca la regidora.
Por último, rechazó de lleno que la situación haya provocado una ingobernabilidad del municipio porque, a pesar del abandono de competencia de los tres ediles, “el resto hemos seguido trabajando, y lo seguimos haciendo, al cien por cien por nuestra localidad”. Además, recordó que en la práctica poco ha cambiado ya que “por la situación laboral de los concejales que dejan el Equipo de Gobierno, la realidad es que no estaban en el día a día del ayuntamiento”. Además, destacó que el edil del Partido Andalucista, Antonio Acosta, pasará a formar parte de la Junta de Gobierno Local ante la salida de dos de los concejales que eran del PP. Y añadió: «En los plenos seguiremos funcionando igual y pediremos tanto a los ediles del PSOE como al de IAB y, por supuesto, a los que ahora formarán parte del Grupo Mixto, que apoyen aquellas iniciativas que consideren apropiadas para El Bosque, por responsabilidad con su pueblo , independientemente de intereses partidistas o de cuestiones personales».