El colectivo Ecologistas en Acción ha presentado sugerencias para la elaboración de un estudio de impacto ambiental de uno de los dos parques de esquí acuático arrastrado por cables, promovidos por un particular, que se pretenden instalar en el pantano de Arcos. Las sugerencias han sido solicitadas a esta organización por la Delegación Provincial de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente. Los ecologistas aclaran que no se oponen al «parque de esquí acuático de Arcos, siempre que se ubique fuera del paraje natural de la cola del pantano de Arcos». Las sugerencias están basadas fundamentalmente en el decreto 18/2012, de 7 de febrero, por el que se aprueba el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de los parajes naturales Cola del Embalse de Bornos y Cola del Embalse de Arcos y se amplía el ámbito territorial de los citados parajes naturales. «Lo único que pretenden los ecologistas -afirman- es que se haga el parque de esquí cumpliéndose la normativa».
En un comunicado difundido el 6 de noviembre de 2012 por Ecologistas en Acción se dice: «Para los ecologistas, al ampliar el decreto señalado la protección del paraje natural, el parque de esquí náutico debe desplazarse hacia sectores del pantano alejados de los límites del paraje natural, no pudiéndose ubicar dentro de la zona de protección. Los ecologistas recuerdan que el PGOU de Arcos también califica el suelo del Paraje Natural como suelo no urbanizable de especial protección. Los equipamientos turísticos, según la normativa, deben estar fuera del paraje natural, estando prohibidos los que no estén promovidos por la Consejería de Medio Ambiente, que deberán corresponderse con alguna de las siguientes tipologías: mirador, observatorio, sendero señalizado, carril bici o itinerario botánico.
Los ecologistas sugieren que esta instalación no debería de suponer un foco de perturbación sobre la comunidad de aves, ya que más infraestructuras facilitan el desarrollo de actuaciones molestas e incontroladas como el trasiego constante de vehículos, vertidos de escombros, basura, ruidos…, debiéndose fomentar medidas necesarias para mitigar los impactos lumínicos y sonoros y los de fragmentación de habitat producidos por las infraestructuras sobre la fauna silvestre y la vegetación, por lo que deben de asegurarse estas condiciones, si queremos mantener un paraje natural en Arcos, que asegura además un turismo verde.
También señalan, entre otras sugerencias, que la que la casa club deberá mantener todas las condiciones de depuración de aguas residuales que la ley contempla o que la actividad está promovida por un particular, por lo que se beneficiará para su negocio de una zona de dominio público, que es de todos y todas».