La Consejería de Salud de la Junta de Andalucía difundió el 15 de septiembre de 2011 el siguiente comunicado: «El Distrito Sanitario Sierra de Cádiz ha activado el Plan de Prevención y Actuación ante Agresiones del Servicio Andaluz de Salud (SAS), que incluye asistencia sanitaria y jurídica, así como apoyo psicológico, ante un episodio de violencia sufrido por un médico de urgencias del centro de salud de Arcos. Tanto el distrito como la Delegación Provincial de Salud, desean mostrar su solidaridad y apoyo a este profesional sanitario que pasada la medianoche de hoy, ha sufrido en el ejercicio de su labor, una agresión física, así como amenazas e insultos por parte de una usuaria. El médico afectado se ha acogido a los servicios jurídicos del Distrito Sierra para presentar la correspondiente denuncia contra la agresora. La agresión física o intimidación grave contra profesionales sanitarios en el ejercicio de su función pública asistencial viene siendo considerada como delito de atentado por los tribunales de justicia, y así se han dictado sentencias en estos casos, castigándose con penas de uno a tres años de prisión».
El comunicado añade: «Salud condena cualquier tipo de violencia, tanto física como verbal, dentro o fuera de un centro sanitario, recordando que bajo ningún concepto o circunstancia puede justificarse este tipo de actuaciones.
El SAS pone a disposición de sus trabajadores un plan de prevención con el objetivo prioritario de reducir las posibles agresiones incorporando, además de un protocolo de actuación con asistencia jurídica y apoyo psicológico, una serie de herramientas tales como cursos de formación en manejo de situaciones conflictivas, adaptaciones de locales y ubicación de profesionales y análisis de las incidencias que se producen, entre otros».